Nuestra Historia
Tú intentabas advertirme...Yo que rechazaba todos tus miedos,
Para que al final muriera sin dejar de herirme...
Nuestros miedos como negros lloredos.
Tus palabras que quedaron tatuadas,
En la órbita de mis pensamientos
Fueron: ¨ya no tiene caso¨. Decepción ampliada.
¨Todo tiene un principio y un fin¨.
Mis palabras se las llevó el viento.
9 de agosto es un día especial,
Una fecha que no olvidarás; lo aseguro...
Y por más higiene cerebral
No podré limpiar ese abismo tan oscuro.
El maldito café de tus ojos color negro,
Es y será el verdugo de mi desdicha,
No es orgullo pero me alegro...
Jamás me libraré de la amarga condena,
Por sentir tu aire que me encapricha.
Fuiste tan perfecta, fría y frágil,
Llena de ideas y con nubes negras detrás,
Hermosa, práctica y sutil...
Nunca más miraré en tu piel mis letras.
Quisiste poner las cartas sobre la mesa
Para que no fueran volteadas nunca,
Mientras que yo puse tu fineza
Y nuestro amor sin dejar nada en claro,
Dejando la mesa y nuestras almas truncas.
Los cuentos y poemas que escribimos en silencio...
Todos me los tatué en la mirada,
Que aún guardo para ti en el encierro
De mi alma destrozada.
Querías estar siempre para mí,
quisiste ser parte de mi vida...
Querías volverme feliz,
Pero yo sólo me esforzaba
En mantener tu boca llovida.
Yo tan torpe e ignorante,
No pude ver los errores tan marcados
Haciendo nuestra relación para ti tan frustrante...
Por ideas que debían quedar en el pasado.
Jamás me esforcé por hacerte parte de mi vida
No me mostré herido ante tus besos,
Mostraba lágrimas inquebrantables, rígidas...
Nunca me mostré herido para que fueras mi bálsamo de amor,
Solo seguí convirtiéndote en eternos versos.
Sin ninguna gota de ternura...
Si hubiéramos pensado más con el corazón,
Habríamos vivido para siempre sin cordura
Pero siempre nos obligamos a pensar con la razón.
Se acabó nuestra relación,
Pero nunca nuestro amor de cuaderno,
Ya no me importa saber quién soy
Si es que soy alguien...
Pues mi amor por ti será eterno.
Aunque fumo más y duermo menos,
Tu imagen dolorosa no deja de girar
Dentro del enigma de mis sueños...
No puedo dejar de suspirar.
Nosotros marcamos nuestro final,
Pero vivo y lo poco que duermo,
Y eso ya no se podrá cambiar,
Anhelando que nos reconciliemos...
No salgo de mi estado de muermo...
La melodía de tu voz se aferra a mi alma
Arrancarla me resulta imposible,
Cada vez pierdo más la calma...
Pero aún así, mi paciencia es inservible.
Siempre le hablo al botón,
Por más lejos que estés de mí,
Que me abrocha el corazón,
No te he abandonado,
Sólo espero que seas feliz.
